Y ahora os voy a contar qué es el squinching (si me cuesta escribirlo, mejor no pienso en pronunciarlo). Allá voy. Se trata de una técnica que consiste en entornar los ojos, pero ¿cómo? pues levantando el párpado inferior hasta llegar a la mitad del ojo, y bajando el superior un poco. En definitiva, cerrar un poco los ojos y ponerse un poco bizco. Todo esto nos lo cuenta Peter Hurley, un fotógrafo norteamericano. Y sí, suena muy estúpido, pero resulta que funciona. Y si no lo creéis mirad este vídeo que os he dejado.
¡Ah! Animaos a utilizar esta técnica y enviadme vuestras fotos a través de Facebook, Instagram, email o por donde queráis, que todos queremos ver lo bien que os sale para que nos enseñéis y nos contéis vuestro truquillo. A algunos, no nos sale lo de los ojos ni queriendo (ya os estoy imaginando probando esto delante de un espejo :P)
¡Besos gente top!
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Ja, ja, ja...la idea del reflote me parece muy acertada y en cuanto a la técnica, lo confieso, he estado practicando como el colega del video. Parezco bobona...Supongo que es prática...Me parto. Un beso
ResponderEliminarjajajaj! Confieso que yo también he estado haciendo el tonto delante del espejo. Me alegro mucho de que os haya gustado la idea del reflote de los miércoles. Gracias por pasarte!
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